A propósito del articulo del Diario La Nación
"Acusan a juez de la Suprema de fallar contra trabajadores"
Los políticos y los jueces son mal percibidos por la ciudadanía.
Todos los chilenos sabemos como operan. Los vemos actuar.
Nosotros que vivimos en las poblaciones y nos interrelacionamos con nuestros amigos y vecinos, hemos escuchado, hemos visto.
Lo mismo ocurre con el mundo de los abogados. Ellos mismos identifican a jueces, llegando a calificarlos de corruptos.
Ese poder oscuro, que maneja y muñequea a su amaño, sentencias y votos en el hemiciclo, está convirtiendo a nuestro país en un espacio lamentoso.
Lo que pasa en la escuela de derecho es una muestra del estado calamitoso en que se encuentran los valores ético, para que hablar de la moral (tan vilipendiada como preceptos…).
Andronico Lusick (Q.E.P.D.), todos los años daba un concierto en el teatro municipal, donde invitaba al poder judicial, no se si seguirá la tradición.
Es una burla. Quienes trabajamos, haciendo turnos de noche (que deteriora enormemente la salud), levantándonos a las 5 de la mañana, trabajando los días sábados y domingos. Los trabajadores que mantenemos la actividad económica del país. Los trabajadores que creímos que con el trabajo honrado podríamos mantener una vida digna, darle educación a nuestras hijas e hijos, darnos uno que otro gustito y terminar con nuestra compañera una vida jubilosa, nos comenzamos a dar cuenta que esto no es así.
Las leyes que se crean, al contrario de tender a dar y hacer justicia, se convierten en un laberinto kafkiano donde el que clama resulta ser acusado y castigado.
Al poder judicial le decimos … La Cuarta sala es la Vencida
Pónganse las pilas, no ven que nos podemos aburrir.......
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